Washington, DC
June 19, 2009
Agricultural Research Service, USDA
By Jan
Suszkiw
 |
Minute
pirate bug, Orius insidiosus.
La chinche pirata diminuto, Orius insidiosus.
Photo courtesy of John Ruberson, University of Georgia,
Bugwood.org |
he minute pirate bug, Orius
insidiosus, was formerly thought to work alone, spearing its
prey with a long, needlelike beak and sucking out its victim’s
juices. But now it appears this tiny agricultural ally of
commercial growers and home gardeners may have a partner: O.
pumilio, a closely related species found hunting with it on
an organic farm in Alachua County in north- central Florida.
The 2008 discovery by
Agricultural Research Service
(ARS) scientists, reported in the June issue of
Florida Entomologist,
marks the first time the two pirate bug species have been
observed prowling the same “hunting grounds”—the flowers of a
crop of false Queen Anne’s lace—and stalking the same prey:
Frankliniella bispinosa (Morgan), also known as Florida
flower thrips.
Although O. insidiosus
occurs throughout the United States and is used commercially to
biologically control myriad crop pests, O. pumilio is a
little-known species whose U.S. range until now had only been
documented in south Florida, notes
Jeff Shapiro. He’s an entomologist with the ARS
Center for Medical, Agricultural and Veterinary Entomology
in Gainesville, Fla.
Specimens collected from the
Alachua County organic farm showed that O. insidiosus
outnumbered O. pumilio by more than three to one. And yet
both species preyed on thrips without apparent rivalry. Was this
a case of insect magnanimity on O. insidiosus' part? No,
the more likely reason was the abundance of thrips on the
flowers, reports Shapiro.
Along with ARS colleagues and
the organic farmer, Shapiro also observed that O. insidiosus
males outnumbered females almost three to one—though for reasons
yet unknown—while O. pumilio’s sex ratio was even.
Additional collections and field surveys are under way to track
other cases of coexistence and learn more about O. pumilio
and its distribution. Ultimately, such information could yield
new conservation strategies for bolstering the bugs’ numbers or
improving their effectiveness as commercial biocontrol agents.
ARS is the principal
intramural scientific research agency of the
U.S. Department of Agriculture.
Se pensaba anteriormente que la
chinche pirata diminuto, Orius insidiosus, trabaja solo,
pinchando su presa con su pico largo y agudo y chupando los
jugos de su víctima. Pero ahora parece que este aliado pequeño
de los jardineros y los cultivadores comerciales tiene un
compañero: O. pumilio, la cual es una especia
estrechamente relacionada descubierta cazando con O.
insidiosus en una granja orgánica en el condado Alachua en
la parte norte-central de la Florida.
Este descubrimiento en el año
2008 por científicos del
Servicio de Investigación Agrícola—y publicado en la revista
'Florida Entomologist’
(Entomólogo de la Florida) este mes—es la primera observación de
las dos especies en el mismo sitio—las flores del apio cimarrón,
Ammi majus—y cazando la misma presa: Frankliniella
bispinosa (Morgan), también conocido como los piojitos de
Florida.
Aunque O. insidiosus
está presente en todas partes de EE.UU. y es usada
comercialmente como un agente de control biológico contra una
variedad amplia de insectos que atacan cultivos, O. pumilio
es una especie menos conocida y encontrada anteriormente
solamente en la parte sureña de la Florida, según
Jeff Shapiro. Él es entomólogo con el
Centro de Entomología Médica, Agrícola y Veterinaria
mantenido por el ARS en Gainesville, la Florida.
Los especímenes colectados en
la granja orgánica en el condado Alachua mostraron que la
población de O. insidiosus fue por lo menos tres veces
más grande que la de O. pumilio. Pero ambas especies se
alimentaron de los trips sin rivalidad. ¿Era un caso de
magnanimidad por O. insidiosus? No, la razón más probable
era la abundancia de trips en las flores, según Shapiro.
Junto con el granjero orgánico
y colegas en el ARS, Shapiro también observó que los machos de
O. insidiosus fueron casi tres veces más numerosos que
las hembras—aunque por razones no conocidas—mientras la
proporción de machos y hembras de O. pumilio fue igual.
Colecciones adicionales y estudios de campo están en curso para
descubrir otros casos de coexistencia y para aprender más sobre
O. pumilio y su distribución. Finalmente, esta
información podría llevar a nuevas estrategias para aumentar la
población de estos insectos beneficiosos o mejorar su eficaz
como agentes comerciales de biocontrol.
ARS es la agencia principal
de investigaciones científicas del
Departamento e
Agricultura de EE.UU. |