Washington, DC
November 28, 2008
Agricultural Research Service, USDA
By
Alfredo Flores
Boll
weevils don't hibernate during winter in the subtropics but
actually remain active, feeding on orange, grapefruit and other
plants, according to an
Agricultural Research Service (ARS) scientist studying this
infamous cotton pest.
For many years, from South
Texas to Argentina, the feeding habits and nutritional
requirements of the boll weevil (Anthonomus grandis grandis
Boheman) have been poorly understood, making it harder to
eradicate the pest.
Despite great strides in
controlling the boll weevil, it remains one of the most
destructive cotton pests in the Western Hemisphere. The weevils,
which feed on and lay eggs in cotton buds, can destroy a crop if
left unchecked.
For nearly a decade, ARS
entomologist
Allan Showler at the agency's
Integrated Farming and Natural Resources Research Unit in
Weslaco, Texas, has been examining boll weevil ecology in
subtropical environments. The research refines knowledge on the
boll weevil that may help enhance the Boll Weevil Eradication
Program in the subtropics, run by the
U.S. Department of Agriculture
(USDA) Animal and Plant
Health Inspection Service and supported by ARS research.
The program has enabled cotton
farmers to reduce their use of pesticides by between 40 and 100
percent, and increase their cotton yields by at least 10 percent
since the program’s inception.
In the winter months, it was
previously believed that the weevils entered a form of
hibernation or dormancy called diapause. But Showler has found
that boll weevils generally remain active in during winter in
the subtropics, surviving by feeding on the edible portion of
orange, grapefruit and prickly pear cactus, and possibly other
plants. Orange and grapefruit can sustain adult boll weevils for
as long as eight months--more than enough to see them through
the mandatory cotton-free winter period.
The research could help
scientists develop new, biological and ecological approaches to
controlling the boll weevils. Most of the new proposed tactics
recommended by Showler and collaborators do not rely on
insecticide use, and the one that does ensures that insecticides
would be applied when they would be most effective.
Read more about this research in the November/December 2008
issue of Agricultural Research magazine.
ARS is a scientific research
agency of USDA.
Los gorgojos del algodón no
hibernan durante el invierno en los subtrópicos, pero en
realidad se mantienen activos, alimentándose en naranjas,
pomelos y otras plantas, según un científico del
Servicio de Investigación Agrícola (ARS) que está estudiando
este famoso insecto plaga.
Por muchos años, desde la parte
sur de Texas hasta Argentina, las costumbres y necesidades
nutricionales del gorgojo del algodón (Anthonomus grandis
grandis Boheman) han sido poco entendidas, de este modo
complicando la erradicación de esta plaga.
A pesar de grandes avances en
controlar el gorgojo del algodón, todavía es una de las plagas
más destructoras de algodón en el hemisferio occidental. Los
gorgojos, los cuales se alimentan y ponen huevos en las yemas de
algodón, pueden destruir un cultivo entero si no controlado.
Por casi una década, entomólogo
Allan Showler en la
Unidad de Investigación de Granjería Integrada y Recursos
Naturales mantenida por el ARS en Weslaco, Texas, ha
estudiado la ecología del gorgojo del algodón en los ambientes
subtropicales. La investigación aumenta los conocimientos sobre
el gorgojo del algodón que podrían ayudar a mejorar el Programa
de Erradicación del Gorgojo del Algodón en los subtrópicos. Este
programa es dirigido por el
Servicio de Inspección y Sanidad Agropecuaria del
Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA por sus siglas
en inglés), y apoyado por las investigaciones del ARS.
El programa les ha permitido a
los granjeros del algodón a reducir su uso de pesticidas por el
40 al 50 por ciento y aumentar sus rendimientos de algodón por
lo menos el 10 por ciento desde el principio del programa.
En los meses del invierno, se
pensaba que los gorgojos entraban en una forma de hibernación o
inactividad. Pero Showler ha descubierto que los gorgojos del
algodón generalmente se mantienen activos durante el invierno en
los subtrópicos, sobreviviendo alimentándose en la porción
comestible de naranjas, pomelos y nopal, y posiblemente otras
plantas. Las naranjas y los pomelos pueden sustentar los
gorgojos adultos por hasta ocho meses--más que suficiente para
alimentarlos durante el período obligatorio sin algodón durante
el invierno.
Esta investigación podría
ayudarles a los científicos a desarrollar nuevos métodos
biológicos y ecológicos de controlar el gorgojo del algodón.
Muchas de las nuevas tácticas recomendadas por Showler y sus
colaboradores no confían en el uso de insecticidas, y la sola
táctica que sí usa insecticidas asegura que los productos
químicos serán aplicados cuando serán más eficaces.
Lea más sobre esta investigación en la revista 'Agricultural
Research' de noviembre/diciembre del 2008.
ARS es una agencia de
investigaciones científicas del USDA. |